La famosa ley de Fitts viene a decir que:
El tamaño de un elemento y la cercanía de este respecto al puntero del ratón, es inversamente proporcional al tiempo que necesitaremos para acceder a el.
Algo que resulta evidente y muy lógico, pero que se suele pasar por alto en muchas ocasiones, a veces en pro del diseño gráfico y en deterioro de la usabilidad.
Algunos consejos para aplicar la ley de Fitts
- Se pueden agrupar y minimizar el espacio entre los elementos que pueden ser accedidos de forma consecutiva.
- Puede ser conveniente incorporar un botón «subir» si el sitio web tiene mucha verticalidad y el menú se encuentra en la zona superior.
- El «botón retroceder» es el más usado del navegador, por lo que es conveniente minimizar la distancia entre la zona de actuación de la página principal y el botón retroceder.
- Si el tamaño de los elementos es «grande» el usuario podrá acceder a ellos de forma rápida y precisa.